El invierno del mundo

Hoy os voy a contar la experiencia vivida con este libro que terminé hace un par de semanas y que de vez en cuando me sigue dejando alucinada cuando me viene el recuerdo de algunos de sus pasajes a la cabeza... Y digo bien, "experiencia vivida" porque este libro ha conseguido absorberme como a Bastian en La Historia Interminable, iba en el tren, el metro o el autobús, saltándome mis paradas de destino porque yo realmente, estaba luchando en alguna batalla, debatiendo contra las injustas medidas tomadas por las personas que estaban en el poder en aquella época, maravillada observando la flota en el puerto de Pearl Harbor, conduciendo ambulancias entre las bombas durante el Blitz londinense y tirándome en paracaídas por la noche sobre Francia para liberar el terreno ocupado.
Es el segundo libro de una trilogía, The Century, que está elaborando el escritor nacido en mi querido Cardiff,  Ken Follet, éste basado en el ascenso de Hitler al poder y el comienzo de la II Guerra Mundial. Todos los personajes de El Invierno del Mundo tienen ya una historia previa que comienza en el primer libro, La caída de los gigantes, ambientado en la situación mundial durante la I Guerra Mundial. Aunque, está tan bien explicado que cualquier persona que no haya leído el primero, podría perfectamente engancharse al segundo y entenderlo todo.
Como he escuchado a muchos "críticos" de mi entorno, titulados y no tanto, Ken Follet no es historiador, sino filósofo dedicado al periodismo y finalmente a la escritura de novelas (muy comerciales, sí lo admito). Novelas que, para enganchar al público hasta el final y entretenerles, supongo que aunque se desarrollen en ambientes históricos reales, tendrán que ser adornadas con personajes, historias personales (muy dramáticas y apasionadas, porque mira que lo pasan mal siempre los personajes de Follet...) y conversaciones ficticios, con lo que, en efecto, tengo que estar de acuerdo con estos "críticos", en que desde el punto de vista del aprendizaje y el estudio serio de la historia y la política, estas novelas no son fiables. Pero, lo que sí puedo asegurar es que las descripciones de cada situación te hacen imaginarlas con total nitidez y las historias personales te sumergen enseguida a identificarte y sentir todo lo que les ocurre a los personajes del libro.
Sin poder esperar ya a que anuncien la publicación del tercer libro, que completará la historia (y finiquitará la capacidad muscular de mi espalda, si el peso de este volumen continúa con su tendencia a subir) y volverá a hacerme sentir, desde mi asiento del tren, la protagonista de una superproducción cinematográfica.